Por qué reemplazar máquinas registradoras por sistemas TPV

Por qué reemplazar máquinas registradoras por sistemas TPV

Terminal punto de ventaCuando paseamos por tiendas de barrio, a veces nos fijamos que algunos comercios conservan sus viejas máquinas registradoras. Esto de por sí no parece que tenga nada de malo. Si todavía funciona, es lógico que el empresario no quiera hacer un desembolso económico para instalar un sistema TPV (Terminal Punto de Venta) que aún no conoce.

Sin embargo, una máquina registradora puede plantear algunos inconvenientes para la PYME o pequeño negocio. Esos inconvenientes se traducen en falta de competitividad y tareas mecánicas que, aunque no nos damos cuenta, suponen un coste de oportunidad. ¿Por qué deberíamos reemplazar las cajas registradoras antiguas por un TPV? En este artículo te damos algunas razones.

Razones para cambiar una caja registradora por un TPV

Hay muchas razones para modernizarse y reemplazar nuestra vieja máquina por un terminal punto de venta. Te vamos a dar seis principales ventajas por las que se recomienda pasarte a una TPV.

software TPV hostelería

1. El registro en el inventario es automático

El primer motivo que nos viene a la cabeza tiene que ver con la economía del tiempo. Cada vez que hacemos una transacción en nuestra tienda, con el TPV queda registrado en el inventario. No tenemos que pasar horas y horas haciendo la contabilidad, traspasando la información de los recibos al registro contable, ya que  con un buen software de gestión TPV se hace automáticamente. Piensa en la cantidad de tiempo que has perdido haciendo esto.

2. Es más fácil encontrar los datos

A la hora de buscar un dato perdido, por ejemplo, con una caja registradora tardaríamos horas en dar con la información. Sin embargo, con los sistemas TPV lo podemos encontrar al instante. Podemos tener información relevante, como cuánto se ha vendido cada día, estadísticas de las ventas de cada empleado, etc.

3. Hay menor riesgo de fallo humano

Luego está el tema de la organización. En un TPV tú tienes registrados todos los productos que tienes. Basta apretar unos botones en la pantalla táctil para que se realice la transacción. En la máquina registradora, tienes que marcar el precio de cada compra, con lo que el riesgo de errores humanos es mucho mayor.

4. El ciclo de venta es más corto

Se reducen las colas y se hacen los cobros de manera mucho más rápida. Eso mejora tu imagen como empresa; los clientes se desesperan cuando tienen que esperar mucho. Piensa en la rapidez con la que te cobran en la cola del McDonalds. Pasan cientos o incluso miles de personas al día. ¿Te imaginas lo que sería hacerlo con una máquina registradora?

5. Se puede personalizar el ticket

La información que te aparece en una máquina registradora, incluso si es de las más modernas, es muy reducida en comparación con las posibilidades que te ofrece un buen terminal.

6. El mantenimiento no es tan costoso

Una máquina registradora es un aparato complejo y que requiere un técnico especializado si hay que repararlo. Un TPV es un ordenador con un software adecuado y algunos periféricos, hay muchas menos incidencias y es más fácil y cómodo de usar.

En definitiva, que te ahorras trabajos y haces la vida más cómoda a tus clientes, tan sólo adelantándote a algo que pasará en los próximos años y ya está sucediendo; la desaparición de las máquinas registradoras.

¿Estás de acuerdo con que este hecho se está produciendo ya? ¿Cómo gestionas las transacciones en tu negocio?

(First photo by Obra Social Caja del Mediterráneo on Flickr)